Deposita tu confianza en el Señor cada día, ¡Él renovará tus fuerzas!
|«Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios con toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.» Filipenses 4:6,7.
No debemos de afanarnos por nada en esta vida, a pesar de que en muchas ocasiones nos afanamos, sin embargo lo ideal es acudir a la oración y no a la desesperación. Desechar el afán y permanecer en una comunión gozosa con el Señor. Llevemos nuestros anhelos al Dios Todopoderoso para el cual nada es imposible. Él es el guardián de nuestra vida y nuestra esperanza, podemos acudir a Él con actitud de oración, confiadamente.
VEA
7 Cosas que no sabías sobre tu cuerpo
No oremos dudando sino agradecidamente, consideren que ya tienen la petición contestada y den gracias a Dios por ello. Ya que Dios cuando ve esa actitud se glorifica, porque esta es Su voluntad que demos gracias a Él en todo.
Además el versículo continua diciendo: «Sean conocidas vuestras peticiones». No acudan al hombre, vallan directamente a su Dios ya que nadie nos ama y nos entiende más que nuestro Salvador.
Cuando esto pasa entonces hay paz en nuestros corazones, y somos bendecidos por Él, pero es cuando guardamos y hacemos conforme a lo escrito a la escritura.
¡Dios te bendiga!