Después de orar estando perdidos en el mar, son rescatados por un barco llamado «AMÉN»
|Dos jóvenes llamados Tyler Smith y Heather Brown estaban divirtiéndose en su día de descanso de último año con sus compañeros de estudios cuando sucedió este malaventurado incidente.
Como los dos eran buenos nadadores, los dos atletas determinaron cruzar a nado la ensenada de St. Augustine desde la isla Vilano Point Anastasia, a 500 metros de distancia. Pero, fue mucho más lejos de lo que imaginaron.
Mientras aun nadaban, se hallaban cada vez más alejados de la orilla. La superficie estaba fuera de la vista y todo lo que podían ver era solo agua.
Ambos tomaron la decisión de parar de nadar y utilizaron la fuerza que le quedaba para mantenerse flotando con la esperanza de sobrevivir.
VEA
Texto7 Cosas que no sabías sobre tu cuerpo
A partir de ahí, el propósito de Tyler Heather era resistir hasta que llegara alguien en señal de rescate. Los dos compañeros hicieron una oración en forma de clamor desesperados por un milagro de Dios.
Hasta que finalmente, luego de una hora y 30 minutos, sus compañeros se dieron cuenta que no estaban. Alguien llamó a emergencias y se le avisó a la madre de Heather. Recibió llamada cuando estaba en la iglesia. Después, la iglesia empezó a orar por los jóvenes desaparecidos.
Mientras que aun flotaban en medio del océano con gran tempestad, y ya agotados, Heather y Tyler batallaban para mantenerse a flote.
«Estaba vociferando, ´Dios, por favor ayúdame´, una y otra vez», recordó Heather.
Mientras que Tyler decía: «Dios, por favor sálvanos. ¿Puedes enviarnos algo por favor?».
El joven imaginó que ese iba ser el último día de su vida. Candados y perdidos de esperanza, de momento escucharon el motor de un barco sobre las aguas.
Como un milagro, las personas que iban en el barco escucharon y nos vieron. Cuando sacaron a Heather y Tyler del agua, vieron que el barco llevaba por nombre «The Amen» (El amén, en español).
Cuando Heather estaba a bordo, lo primero que expresó fue «Dios es real». Desde aquel entonces, los dos jóvenes fortalecieron su fe y su relación con el Dios Todopoderoso.