HAGEO 1:8
|Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Jehová.
En el libro de Hageo, nos presenta la historia de la construcción del templo en tiempo de Esdras y Nehemias. En este versículo vemos como Dios mismo establece la pauta, diciéndole al pueblo que suba al monte.
Debemos saber que estaban en un tiempo difícil, pero Dios le habla a través de un profeta, esto nos deja entender que en medio de tiempo difíciles, Dios va a levantar a una persona para que direcciones su pueblo.
VEA
7 COSAS QUE NO SABÍAS SOBRE TU CUERPO
Dios nos manda a subir al monte y traer madera. Dios nos manda a que nos involucremos en su obra, y reedificar su casa. Debemos de estar dispuesto a trabajar para Dios y en lo de Dios.
Cuando hagamos eso, dice más adelante que Dios pondrá su voluntad. La voluntad de Dios establecida en nuestra vida, produce orden y un ambiente de lo que se mueve en el cielo, como Jesús mismo oró, que se haga la voluntad de Dios en la tierra como se hace en el cielo.
Donde está la voluntad de Dios, Dios se glorifica, muchos hombre quieren establecer su propia voluntad y no la de Dios. Donde no hay voluntad de Dios, no hay gloria, es decir Dios no es glorificado.