Mateo 8:7

Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré.

Este versículo corresponde a la historia del siervo del centurión, que estaba enfermo postrado en cama. La biblia dice que el centurión fue donde Jesús, para que el señor haga el milagro. Nosotros debemos de hacer lo mismo, y acudir donde Jesús primero para que el obre en nuestras vidas.

Cuando aquel hombre va y le presenta la situación al señor, Jesús de una vez le respondió que él iría a sanarlo. El señor está presto para sanar y salvar a aquellos cuando lo pedimos, cuando le clamamos.

VEA

7 Cosas que no sabías sobre tu cuerpo

El centurión se humilló reconociendo que no era digno de que Jesús entre en su casa, por lo cual le dijo que diga la palabra y su criado sanaría. Esta fe conmovió a Jesús y sanó aquel hombre.

¿Qué estás esperando?

Acude a Jesús para que él te diga como le dijo al centurión. «Iré y le sanaré». El señor va de camino, como hizo con Jairo, con Lázaro, con el hijo de la viuda de Naín». Así mismo irá donde ti.