«No nos quiten nuestros templo por favor», fue el ruego de Cristianos en Egipto

La presencia de los musulmanes extremistas en Egipto es muy patente. Por lo que, han llevado a la deserción de los cristianos en cada lugar donde se encuentra, destruyendo sus templos, persiguiéndolos, matándolos y prohibiendo el culto al Dios verdadero.

Uno de los edificios que había pertenecido a los cristianos por 15 años, fue derrumbado por las autoridades, por la presión de parte de los musulmanes.

Esta era la única iglesia cristiana de  en ese pueblo. Los miembros de aquella iglesia crecía más y más. Por lo que ya, el espacio era muy pequeño para ellos, y decidieron agrandarlo. Cuando apenas habían comenzado el trabajo de construcción, de una ve los extremistas lo atacaron.

Bishoy uno de los diácono, cuenta que los radicales comenzaron a construir su mezquita al lado de la iglesia. Aunque el pueblo tiene cuatro mezquitas y realmente no necesita más.

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El alcalde de la aldea dio la orden para que la mezquita que la han construido ilegalmente  fuera destruida, igualmente que la iglesia construida legalmente. «El abogado de la iglesia hizo una apelación oficial contra esta orden, pero el alcalde la ignoró, y envió a 200 policías sin previo aviso», dice Bishoy.

Fue muy lamentable, el hecho de que estos destruyera el templo el 20 de mayo, ese templo que habían adquirido legalmente hace 15 años. Mostraron sus documentos oficiales a la policía, pero no pusieron caso.

La policía y extremistas golpearon al pastor, de tal manera que se desmayó. Después dispararon gases lacrimógenos  a los feligreses de la iglesia, hasta atacaron  mujeres y niños. Apresaron a varios miembros de la iglesia, incluyendo a mujeres y niños.

Al día siguiente liberaron a los apresados, mientras que el del brazo roto recibió atención médica.

Los miembros de la iglesia tuvieron que presenciar como le derribaron su templo, por completo, y hasta sus libros sobre el cristianismo recibieron daños. Esta era la única iglesia en el pueblo. La iglesia más cercana le queda 15 km y la mayoría de ellos no tienen los medios para viajar fuera de su aldea.

Debemos orar por ellos, es una situación difícil. Dios tiene el control.